Imagen de Jung Eun Park |
El amor es la única decepción programada,
la única desgracia previsible que deseamos repetir.
Frédéric Beigbeder
Ahora sé que aquel que no
sonríe
cuando tu vida sí lo hace
el que elige un bache
para acompañarte,
te devora de día
y te engulle por la noche.
Quien solo se acuerda de
ti
cuando truena entre sus
piernas,
y solo se olvida de ti
cuando hay otra más cerca.
No te quiere.
Que aquel que lee tus
cartas,
las que no te escribe
que insiste en convertir
tus noes en síes
en no respetar tus
escondites
pero él se esconde
y se traga la llave de su propio
cuarto.
Quien mueve la cuerda por
la que caminas
y se empeña en que sigas
siendo equilibrista,
que con tus lágrimas se
hace un zumo
mientras su falsa lengua
arremete contra la tuya.
No te quiere.
Porque hoy solo dura unas
horas,
ahora ya es otro ahora
Te escribo y solo acierto a teclear un NUNCA,
mis besos ya bailan a otro
ritmo,
tengo talento para elegir corazones
que respondan.
Que para ti no me sobran los
instantes,
que para mí son todos mis
segundos.
Y la próxima vez que
quemes mi imagen;
arde con ella.
La próxima vez que te
cruces conmigo,
cierra la puerta.
Me gusta cada vez más, Anaïs
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