Daphne du Maurier
La
historia de hoy es otra historia.
Hay
mucha tinta derramada en una cama sin hacer.
No busques en el dobladillo descosido de la sábana ninguna triquiñuela
del pasado.
El espejo me refleja tal y como soy mientras permito que la lluvia invada un cuarto resucitado, con varios gemidos como banda sonora.
El espejo me refleja tal y como soy mientras permito que la lluvia invada un cuarto resucitado, con varios gemidos como banda sonora.
Sueña con los ojos cerrados.
No
te asomes por el acantilado de ningún miedo.
Límpiate
los zapatos.
No
hables con la boca llena.
No
grites con la boca abierta.
No
grites.
Límpiate
la lengua.
Ya
no tengo que obedecer.
Nadie puede abrir mi puerta si no le cedo la llave. El mes de abril no será nunca cruel si yo lo invento. Crees que no es lunes, crees que ni siquiera es septiembre, pero ahora soy yo quien dibuja el calendario.
Nadie puede abrir mi puerta si no le cedo la llave. El mes de abril no será nunca cruel si yo lo invento. Crees que no es lunes, crees que ni siquiera es septiembre, pero ahora soy yo quien dibuja el calendario.
Y de
repente el deseo es tan intenso que me convierte en amante.
Y de
repente el metro de Madrid se disfraza cada día de salón de baile.
Has bailado en el metro? :D
ResponderEliminarEsa es una historia.
Y sí, sin dobleces, esa eres.
Un abrazo.
Empieza a oler a verano aunque sea primavera. Soy más de bailar en tugurios que en salones de baile...
EliminarQuizá me haya doblado en algún momento pero jamás rota.
Abrazos y Achuchones